Limpieza, seguridad y sostenibilidad
Estefanía Galiano Recio

Cómo limpiar sillas de oficina: tips y consejos

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Para un correcto mantenimiento de nuestras sillas de oficina es fundamental realizar una adecuada limpieza. Llevar una higiene periódica nos permitirá alargar su vida útil y, por tanto, nos ahorrará costes a largo plazo. Además, es una cuestión estética, ya que tanto si se utiliza en un negocio como en un despacho particular, una silla deteriorada puede dar muy mala imagen. Para evitarlo, en Ofiprix te ofrecemos algunos consejos y tips para limpiar una silla de oficina correctamente.

Consejos para limpiar sillas de oficina

No todo el mundo sabe cómo limpiar una silla de oficina de la forma adecuada, ya que se pueden estar utilizando productos que dañen la tapicería o que incluso hagan perder el lustre de la propia estructura de la silla. Los propios trapos con los que limpias tus sillas de oficina pueden ser perjudiciales si no utilizas el tejido correcto.

A continuación, te damos las principales claves para limpiar todas las partes de tus sillas de oficina para hacer que duren mucho más tiempo en perfectas condiciones.

Limpiar la tapicería de una silla de oficina

Tener en cuenta el tipo de tapicería de tu silla de oficina es esencial para saber cómo limpiarla de la manera correcta.

  • ¿Cómo limpiar una silla de oficina de tela? Para empezar, no debes utilizar desinfectantes porque, por lo general, dañan el tejido y degradan el color. Lo ideal es utilizar un pulverizador con agua y un poco de detergente. Rociaremos la mezcla de manera uniforme pero sin empapar la tela y, tras un par de minutos, utilizaremos la aspiradora para eliminar el exceso de humedad. Finalmente, deja secar la silla al aire libre pero no directamente al sol si quieres que conserve su color original por más tiempo.
  • ¿Cómo limpiar sillas de polipiel? La piel sintética es impermeable, lo que facilita mucho la limpieza de tu silla de oficina. Puedes utilizar la misma fórmula que con las sillas de tela (espolvorear agua y jabón) o una disolución de agua y amoniaco. Antes de eso, usa un trapo de microfibra para eliminar el polvo que pueda tener la silla. Ten cuidado de no usar productos para tejidos de piel porque no se absorben igual con este tipo de material y se quedará una grasa en la superficie que hará que se ensucie todavía más. En cualquier caso, utiliza paños suaves para la limpieza de las sillas de polipiel para que no se dañe la superficie.
  • ¿Cómo limpiar sillas de oficina de piel? Para este tipo de tapizado hay productos específicos. Antes de empezar, retira el polvo con una aspiradora y, después, utiliza el producto correspondiente y aplícalo con suavidad y con un cepillo de cerdas suaves. ¡Y no olvides limpiar los pliegues y las costuras!

No obstante, ante manchas más específicas, tienes que hacer un poco más de esfuerzo. Por ejemplo, si hay un área concreta del asiento que se ha manchado, lo ideal es utilizar un quitamanchas para eliminar toda la suciedad. Las manchas difíciles requieren de una limpieza más fuerte, pero siempre teniendo en cuenta el tipo de tapizado del que estamos hablando. Una forma de evitar daños es probar primero en una zona menos visible de tu silla antes de proceder. Así verás cómo afecta el producto a tu silla.

Limpiar la estructura de las sillas de oficina

Después de limpiar el tapizado de la manera adecuada, debes proceder a la limpieza de la estructura de tu silla de oficina. Ten en cuenta en primer lugar el tipo de material con el que está fabricada y así podrás proceder correctamente.

  • ¿Cómo limpiar una silla de oficina metálica? Si la estructura es metálica descubierta (no pintada), utiliza primero un trapo suave humedecido con agua y jabón. Después pulveriza una disolución de agua y amoniaco y, finalmente, seca la superficie hasta ver el acabado que buscas.
  • ¿Cómo limpiar una silla de oficina de nylon o de poliamida? Utiliza una disolución de agua y jabón y un trapo suave. Ten en cuenta que estos materiales pueden perder el brillo y el color original con el paso del tiempo. Para evitarlo, es recomendable utilizar un producto hidratador de plástico.

Es importante tener en cuenta el material de la estructura de tu silla de oficina porque nunca será igual limpiar una base metálica que de madera. Además, por lo general, para limpiar tu silla será necesario que utilices trapos suaves como los de microfibra para no arañar la superficie y es mejor utilizar agua tibia para que el resultado sea más brillante.

Limpiar las ruedas de las sillas de oficina

Otro paso fundamental es limpiar las ruedas de tu silla de oficina. Esto permitirá que el desplazamiento siga siendo fluido y también evitarás que el suelo se dañe. ¿Cómo limpiar las ruedas de las sillas de oficina?

El primer paso es girar la silla para que las ruedas estén accesibles. Tendrás que retirar con cuidado los restos de pelusas, cabellos y otros elementos que puedan haberse acumulado. Utiliza una aspiradora o aire comprimido para que te sea más fácil pero es posible que tengas que ser más minucioso e incluso desmontar las ruedas si quieres eliminar del todo la suciedad. En tal caso, no olvides después asegurarte de que todos los componentes están bien ajustados en su sitio si no quieres llevarte un susto al sentarte de nuevo en la silla.

Asimismo, deberás engrasar el eje con un lubricante e hidratar el revestimiento de goma sobre la rodadura. Esto último es muy importante porque, si esa goma se estropea, no protegerá el suelo y éste se acabará dañando.

En este sentido, además, desde Ofiprix te recomendamos reemplazar cuando sea necesario los repuestos de tu silla de oficina. Esto es mucho más económico que andar cambiando de silla con tanta frecuencia. Al final, de esto es de lo que se trata cuando hablamos de limpiar las sillas de oficina: de alargar su vida útil lo máximo posible para que sean más duraderas y podamos ahorrar costes innecesarios.