¿Cómo cambiar las ruedas a una silla de oficina?
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Si no se está muy acostumbrado a tener que solucionar este tipo de contratiempos, es posible pensar que la rotura de una o más ruedas de una silla de oficina puede conllevar el hecho de tener que desechar este tipo de mobiliario de trabajo. Sin embargo, lo cierto es que cambiar las ruedas de una silla de oficina resulta muy sencillo si se tiene claro cómo hacerlo, y es mucho más económico que hacer frente a la compra de una nueva silla.
Por eso, hoy mostraremos cómo cambiar las ruedas de una silla giratoria de forma fácil y rápida, de forma que cualquiera pueda hacerlo en pocos minutos, tanto en casa como en la oficina.
Cambiar las ruedas de una silla de oficina, paso a paso
Saber cómo cambiar las ruedas de una silla de oficina es algo básico para mantener en buen estado el mobiliario de oficina y sacarle el máximo rendimiento. Además, resulta vital para garantizar el bienestar de todos los empleados que utilicen una silla que ha empezado a dar problemas con sus ruedas.
Lo mejor es que no importa qué modelo de sillas de oficina sea necesario arreglar, ya que existen principalmente dos sistemas estandarizados de ruedas para ellas que son universales. Tan solo hay que tener en cuenta qué los diferencia y seguir la breve guía paso a paso sobre cómo efectuar este cambio con repuestos de calidad.
Elegir ruedas apropiadas y de calidad
Para empezar, hay que tener claro que, cuanto mejores sean las nuevas ruedas que elijamos, más cómodo estará quien utilice la silla tras su reparación. Es importante elegir repuestos de calidad, que garanticen suavidad a la hora de rodar y, sobre todo, la máxima durabilidad.
En Ofiprix contamos con repuestos de garantías tanto para nuestras sillas como para cualquier otro modelo. No importa si hay que cambiar las ruedas de una silla de oficina como la Kendo con brazos ajustables o de un modelo más económico como la silla de escritorio giratoria Air, porque como veremos a continuación el proceso siempre es el mismo.
Desmontar las ruedas de la silla que están dando problemas
Para cambiar las ruedas de una silla de oficina, lo primero que hay que hacer es retirar las que estén dando problemas, aunque nuestro consejo cuando las ruedas comienzan a dar problemas es cambiarlas todas a la vez, ya que la sensación será de renovación total.
Ahora bien, para cambiar las ruedas de una silla de escritorio o de una silla gaming, lo primero que se debe tener en cuenta es el tipo de sistema por el que están unidas a la estructura inferior de la silla.
Existen dos tipos, y conocerlos es esencial para no dañar la silla de oficina, así como a la hora de elegir los repuestos apropiados:
- Ruedas con rosca, que se quitan y se ponen del mismo modo que un tornillo, girándolas hacia un lado determinado hasta que terminan soltándose.
- Ruedas a presión, también conocidas como ruedas con vástago de agarre. En esta ocasión se ponen apretando la rueda contra la estructura hasta que suena un ‘clic’ y quedan perfectamente encajadas, y se quitan aplicando aceite en la zona de la unión para facilitar su desacoplamiento y, si es necesario, haciendo palanca suavemente con una herramienta como un destornillador plano hasta conseguir desprenderlas.
Para descubrirlo, se le debe dar la vuelta a la silla y apoyarla contra el suelo o bien sobre una estructura elevada que ofrezca estabilidad a la hora de trabajar manualmente. Así, las ruedas serán completamente accesibles y se podrá efectuar el cambio de ruedas en cuestión de minutos.
Cambiar las ruedas de la silla gaming o de escritorio
Una vez se han retirado las ruedas antiguas, toca poner las ruedas nuevas a la silla de oficina. Como ya hemos comentado, la forma de hacerlo dependerá del tipo de acoplamiento que permita cada silla concreta.
De este modo, si es a rosca, tocará girar el soporte de las ruedas en el sentido apropiado hasta llegar al final, que es cuando no se puede seguir girando. En el caso de tratarse de ruedas a presión, habrá que empujar el soporte contra la estructura inferior de la silla hasta conseguir que se inserte por completo.
En este último caso, el aceite aplicado a la hora de sacar las ruedas antiguas debería facilitar aún más la operación. Por cierto, precisamente a causa del uso de sustancias engrasantes, resulta recomendable utilizar un paño con el que proteger tanto las manos como la ropa.
Lo mejor es que se puede repetir el proceso tantas veces como haga falta para darle una nueva vida a cualquier silla de oficina y, además, por muy poco dinero.
Tener siempre repuestos de calidad
Una silla de escritorio con una rueda estropeada, dependiendo del tipo de ‘avería’, puede convertirse en una silla inutilizada durante varios días, por lo menos hasta que se está en disposición de poder cambiarla.
El caso es que no siempre es posible permitirse estar sin una silla giratoria de trabajo hasta poder arreglarla, por eso siempre conviene tener a mano un juego de ruedas de silla de oficina y otros repuestos con los que poder seguir trabajando con normalidad y sin esperas.
De todos modos, en Ofiprix disponemos de todo tipo de repuestos de máxima calidad con envío rápido para que nunca haya que esperar más de la cuenta.
Ahora que ya hemos contado cómo cambiar las ruedas de una silla de oficina de forma eficiente, no hay excusas para no mantener en perfecto estado de revista tanto el mobiliario del centro de trabajo como aquel que se proporcione a las personas con un modelo híbrido o de teletrabajo.
Contar con el material de trabajo apropiado es tan beneficioso para los empleados como para la propia empresa, y además es un signo de que la compañía se preocupa por el bienestar de sus trabajadores, algo cada vez más necesario a la hora de retener a los mejores talentos.