Cómo son las sillas ergonómicas más recomendadas
Utilizar una silla ergonómica que se adapte a nuestra espalda permite evitar molestias, reducir la ausencia en el trabajo por lesión y hasta mejora en el rendimiento laboral. ¿Pero cómo son las sillas ergonómicas más recomendadas?
Las sillas ergonómicas son una necesidad básica si pasas muchas horas al día sentado en tu trabajo. Utilizar una silla ergonómica que se adapte a nuestra espalda permite evitar molestias, reducir la ausencia en el trabajo por lesión y hasta mejora en el rendimiento laboral, ¡todo son ventajas!
Y es que estar muchas horas sentados en la oficina nos lleva a los continuos dolores de espalda. Una mala sujeción de la espalda puede llegar a provocar microtraumatismos dorsales dolorosos, que son una de las principales causas de baja laboral en todo el mundo cada día. Podemos hacer ejercicios para mejorar y cuidar nuestra postura a la hora de sentarnos pero eso no basta. Utilizar una silla correcta que se adapte a nuestras necesidades se convierte en una prioridad. ¿Pero cómo son las sillas ergonómicas más recomendadas? Hoy vamos a descubrirlo.
¿Las sillas ergonómicas afectan al rendimiento?
Las sillas ergonómicas tienen un diseño que se adapta a la forma del cuerpo humano impidiendo que la espalda tome posturas incorrectas durante la jornada laboral. El diseño ergonómico de estas sillas hace que el cuerpo se ajuste a la posición natural cuando está sentado, dando un soporte adecuado a cuello y espalda. Y es que la gravedad juega en nuestra contra al estar sentados.
Una mala postura sentados puede causar severos problemas de columna, síndrome de túnel carpiano, dolor de cuello y espalda, jaquecas constantes y otros problemas relacionados con la salud. El 85% de las personas que trabajan sentadas, sufren problemas de espalda. La selección de la silla adecuada es, por tanto, un paso vital en la prevención de los problemas de salud para las personas que trabajan todo el tiempo sentadas. Invertir en una silla ergonómica es invertir en salud a largo plazo y si para escoger una silla ergonómica debes tener en cuenta varios aspectos.
Estabilidad
La silla de oficina debe ser estable, por ello es preferible que tenga cinco apoyos. De esta forma nos aseguramos de su estabilidad en todo momento.
Movilidad
Una silla ergonómica deba facilitar el movimiento y permite sentarse dinámicamente, es decir que no estemos en la misma posición durante horas y horas. Y es que cambiar frecuentemente de posición, para evitar la presión lateral negativa de los discos intervertebrales y el cansancio que dicha presión provoca, es muy importante.
Sujeción lumbar
Nuestra zona lumbar es la que sufre más presión al pasar muchas horas sentados. Por eso en una silla ergonómica la parte lumbar debe quedar bien sujeta y recogida, en contínuo apoyo. El soporte lumbar de una silla ergonómica se encarga de mantener la postura natural para que tu espalda esté relajada y disminuya la presión de los discos intervertebrales.
Respaldo ajustable
Una de las ventajas de las sillas ergonómicas es que permiten, mediante un mecanismo que normalmente se encuentra en el lateral de la silla, ajustar el respaldo a las necesidades de cada momento y fijarlo según la postura que deseemos adoptar, de forma que la S que hace nuestra columna vertebral esté siempre recogida y apoyada para evitar sobrecargarla.
Algunas sillas incluyen memoria de posición del respaldo para que no tengamos que ajustar la silla cada vez que nos sentamos, si no que vuelva ella sola a su posición. También existen sillas que incluyen un airbag interno en el respaldo que se hincha y deshincha proporcionando máximo confort en la zona lumbar. A veces invertir un poco más en la silla nos sale muy rentable a largo plazo, ¡tenlo en cuenta!
Altura ajustable
La altura de la silla también debe ajustarse, de forma que transfiera el peso corporal a través de las nalgas, no de los muslos. Su altura debe permitir apoyar los hombros y la cabeza correctamente. Por que no pueden usar la misma altura de silla una persona de 2 metros que una de 1.50, poder ajustar su altura nos ayudará a tener una postura más ergonómica y evitar molestias futuras.
Transpirable
La tapicería es la parte de la silla que tenemos en contacto con el cuerpo y a veces es preferible pagar un poco más por una que sea de mayor calidad. El respaldo de la silla debe estar fabricado con material que absorba la transpiración de un uso intensivo. Normalmente todas las sillas ergonómicas disponen de distintos tipos de telas transpirables con mucha resistencia a la abrasión para que resistan el uso continuado en la oficina. También existen telas tipo rejilla que permiten una mejor transpiración.
Además es importante el tipo de espuma con que están hechas. Las espumas inyectadas ofrecen mayor calidad pues aguantan mucho más tiempo sin deformarse.
Brazos ajustables
Otra característica que tu silla ergonómica debe tener es que los brazos sean también ajustables en altura y ángulo para poder adaptarse a nuestra medida perfectamente. Los brazos deben ser deben ser resistentes, con el ancho adecuado y estar a una altura natural. De esta forma nuestros brazos descansarán y sufrirán menos presión.
Comodidad
Por supuesto la comodidad también es una prioridad en una silla ergonómica. Para ello el asiento debe ser curvado hacia abajo, eso dará mayor comodidad a las piernas, aliviará presión y evitará diferentes problemas que podemos sufrir al estar tantas horas en posición sentada, desde entumecimiento de piernas, presión en vasos sanguíneos y sufrir de venas varicosas. Además el tamaño del asiento también es importante. El tamaño del asiento debe ser unos centímetros más ancho que las caderas y glúteos, ya que esta zona recibe gran presión cuando estamos sentados por lo que no conviene que nos sintamos encajados.
En Ofiprix encontrarás una gran cantidad de sillas ergonómicas que cumplen todos estos requisitos y que te ayudarán a una postura más ergonómica y libre de dolores. Antes de decidirte a comprar, pruébalas y comprueba que tu nueva silla cumple todos los requisitos y se adapta perfectamente a ti y a tus necesidades. Para ello lo mejor es dejarse aconsejar por un profesional al que le explicaremos nuestras necesidades y que sabrá aconsejarnos que tipo de silla es la más adecuada en nuestro caso. Nuestra salud está en juego por lo que es una decisión importante que no debe tomarse a la ligera. Feliz semana