Cómo elegir la altura de una mesa de estudio
La altura de una mesa de estudio es un tema importante a la hora de escoger la mesa en las que permanecemos durante muchas horas. Una mala postura por culpa de una mesa demasiado baja o alta puede tener graves consecuencias en nuestra salud a largo plazo.
La ergonomía en el puesto de trabajo o estudio es clave. Para ello la mesa de estudio debe tener la altura correcta. Pues cuando no disponemos de una mesa ajustable en altura está debe ser de la medida correcta. La altura de una mesa de estudio es el punto clave que marcará la diferencia entre una buena o mala postura de la persona al realizar sus labores. Y esto pùede suponer muchos problemas de salud posteriores.
Postura correcta en la mesa de estudio
Las mesas de estudio no tienen distinción de edad. Ya que pueden ser útiles para el pequeño que está en la escuela o para el joven de la secundaria. Pero también para la persona universitaria o para el profesional adulto que necesita un despacho. Así mismo la altura de la mesa de estudio es igual que la altura de la mesa de oficina que se utilizan en la mayoría de empresas. Ya que se trata de una medida recomendada por las normas ergonómicas.
La mesa de estudio debe permitirnos mantener la espalda recta o erguida. Una espalda que además debe estar apoyada en la parte lumbar para su descanso. Y para ello debemos utilizar una silla ergonómica. Esta rectitud debe permitir el acoplamiento natural de los brazos y codos al reposo sobre la superficie de la mesa. De esta forma nuestros brazos descansan y no se ven forzados. Si esto no ocurre, la altura de la mesa de estudio no es apta para esa persona.
Cuando se trata de una mesa de estudio, la ventaja radica en que se instalará para el uso personal. Por lo que resulta posible escoger una mesa acorde a las condiciones físicas y posibles limitaciones de su usuario,. Esto nos dará un cierto nivel de personalización en la estación de trabajo, lo cual se traduce en comodidad, confort y mayor nivel de productividad. Existen mesas que se pueden adaptar en altura, gracias a sus patas regulables.
Problemas derivados de la incorrecta altura de la mesa de estudio
Aunque la mayoría de mesas de estudio del mercado tienen una medida estándar que es la recomendada por las normas de ergonomía. Pues cuando la altura de una mesa de estudio no es la adecuada para quien la utiliza se hace, de forma inconsciente, un esfuerzo innecesario y perjudicial sobre los músculos de la espalda y los brazos. Esto lastima y causa lesiones en la columna a largo plazo.
Por otro lado, la persona puede padecer problemas circulatorios. Pues una mala postura además de perjudicar la espalda, también causa otros problemas. Por ejemplo cuando se obliga al cuerpo a permanecer durante períodos prolongados en espacios donde resulta imposible mover libremente las piernas y cambiarlas de posición. Esto nos acabará generando problemas de circulación.
Cuando una mesa de estudio resulta muy alta, quien le da uso frecuente efectuará movimientos inconscientes en busca de su comodidad. Ocasionando molestias como dolores en los omoplatos. O bien, dolores en la espalda por buscar comodidad con posturas inadecuadas que arquean de forma perjudicial la columna vertebral. Por eso es tan importante que la altura de la mesa de estudio sea la correcta.
La altura de una mesa de estudio
Las mesas de estudio convencionales tienen una altura entre los 70 y 73 cm. En el caso de las mesas de estudio regulables estas deben variar entre los 68 y 76 centímetros respectivamente. Algunos escritorios y mesas de estudio pueden contar con un par de centímetros adicionales de altura. Sin embargo, esto no resultará perjudicial si la persona que usará la estación de estudio puede acoplar y mantener la postura correcta al usarla.
La altura de una mesa de estudio debe permitir la realización de movimientos naturales de forma fluida. Esto es importante para llevar a cabo las actividades de forma eficiente. Y que no represente un problema a largo o corto plazo para nuestra espalda.
Si la mesa se utilizará para otro tipo de actividades, se requiere que la altura de esta esté acorde a cada una de estas. De esta forma evitaremos la falla en la precisión corporal y cubriremos cada una de las labores a realizar de forma fácil. Y sin obligar al cuerpo a realizar movimientos o mantener posturas que resulten dañinas. Esto es algo que debemos tener en cuenta a la hora de adquirir una mesa. ¿se utilizará solo para estudio o qué actividades se realizarán en ella?
Una mesa de estudio puede instalarse en casa para realizar diversas actividades. Entre ellas tareas de escritura, lectura, redacción, digitalización y transcripción de datos. Pero también para otras labores manuales de precisión que pueden hacer diferir la altura de la mesa de acuerdo a cada una de ellas. Dado que las mesas de estudio suelen ser objetos de uso personal, resulta más sencillo escoger individualmente la mesa según nuestras necesidades.
Si no se trata de una mesa ajustable, lo ideal es adquirir una con la altura precisa para la labor más frecuente. Para llevar a cabo labores de escritura y lectura la altura más ergonómica se encuentra entre los 70 y 78 centímetros. Pero para labores que requieren precisión lo ideal es que la mesa tenga una altura oscilante entre 80 cm y 110 centímetros. Mientras que para usar un ordenador de escritorio o portátil para labores de mecanografía basta con una mesa con 68 centímetros de alto.
¿Cómo comprobar si la altura de la mesa de estudio es correcta?
Para verificar que la altura de una mesa de estudio es la correcta, debemos sentarnos y colocarnos según la imagen a continuación. Con los brazos apoyados en la mesa, la espalda recta y los pies bien colocados en el suelo. De esta forma podremos comprobar si podemos mantener esta postura de forma cómoda.
Comprobaremos también si se trata de una mesa que permite el movimiento libre, natural y fluido de los hombros. Pero también la permanencia de la espalda en posición recta y en su posición curva natural. Así como apoyar ambos pies de forma completa sobre el suelo o sobre un reposapiés Además del mantenimiento de los codos en un ángulo de 90° sin posiciones o posturas forzadas. Si es así te encuentras en el camino correcto para escoger la mesa de estudio más adecuada para tus necesidades.
Si bien es cierto que la altura de una mesa de estudio puede escogerse de acuerdo a las condiciones físicas de su dueño, lo ideal es tomar en cuenta los rangos establecidos en las normas UNE. Específicamente la norma UNE-EN 527, parte 1, donde se indica que la altura de las mesas regulables debe oscilar entre los 68 y los 76 centímetros. Todos los fabricantes de mobiliario cumplen con estas normas de ergonomía que permiten trabajar o estudiar de forma cómoda en sus mesas durante horas. Y que nuestra salud no se vea perjudicadas por un exceso de horas en una posición sentada que no le es natural.