Archivadores pequeños para oficina

Uno de los elementos claves en cualquier oficina son los archivadores pequeños, archivadores que tengamos a mano para tener los documentos más inmediatos y de uso contínuo. Vamos a ver qué opciones tenemos.

Archivadores pequeños para oficina, ¿son necesarios?

Los muebles organizadores son necesarios en cualquier espacio donde se requiera mantener el orden. En el caso de las empresas, los archivadores pequeños de oficina son un mobiliario básico. Son perfectos para almacenar todos esos documentos y carpetas que necesitamos tener cerca en el día a día.
En el mercado existen diversos modelos, con distintas cantidades de gavetas, diversos diseños y acabados. Algunos con un nivel mayor de resistencia y durabilidad. Otros con un diseño más decorativo y estético.
Sin embargo, todos cumplen una misión: almacenar documentación importante para la organización. Documentación que se debe mantener en un sitio preciso para ubicarla con rapidez en el momento oportuno.

Materiales para archivadores pequeños

Los archivadores pequeños los podemos encontrar fabricados en distintos materiales. Desde aluminio, madera, acero inoxidable, plástico, chapa de acero fino de primera calidad o melamina. Por otro lado, cada modelo puede contar con un diseño distinto, lo cual ayuda a ampliar la cantidad de opciones para escoger al momento de adquirirlos.

Normalmente los archivadores pequeños suelen tener solamente dos o tres cajones. Si se abren todos los compartimientos llenos del archivador; este inevitablemente va a volcarse y podría provocar un leve pero molesto accidente. Por eso muchos fabricantes los hacen con un mecanismo de seguridad que impide abrir más de un cajón a la vez.

Este tipo de archivadores pequeños también se conocen como cajoneras o bucs. Se suelen situar bajo la mesa para aprovechar más el espacio y ofrecen una gran comodidad para tener la documentación y material más a mano y ordenado. Y de forma que la mesa quedé limpia cuando nos marchemos. Por eso son uno de los elementos más imprescindibles en cualquier oficina.

Ventajas de los archivadores pequeños para oficina

Gracias a la tecnología el uso de papel ha disminuido considerablemente y con ello también lo ha hecho la necesidad de almacenarlo. Pero a pesar de su disminución esta necesidad no se ha extinguido del todo. Por ello sigue siendo importante contar con archivadores pequeños en la oficina.

Imprescindibles para mantener el orden

Algo tan esencial como un escritorio y una silla de oficina no pueden faltar en una oficina. Pero un archivador pequeño para oficina también es uno de esos elementos vitales. Son imprescindibles para mantener el orden en nuestra mesa de trabajo. Y para tenerlo todo bien organizado y ordenado de forma que no tengamos que estar buscando lo que necesitamos.

Archivadores pequeños en distintos materiales y estilos

Los archivadores metálicos son los más demandados en el mercado, por su resistencia y elegancia. Son muy duraderos y resistentes. Pero los archivadores fabricados en melamina y madera cuentan con acabados más estéticos y decorativos. Dependerá del estilo y presupuesto decidirnos por un tipo u otro de archivador pequeño para nuestra oficina. No olvides nunca que la principal función es la de organizar pero la estética también es importante.

Capacidad de almacenamiento

Los archivadores pequeños, a pesar de su tamaño, cuentan con la capacidad de almacenamiento suficiente para resguardar carpetas. Pero también documentos asociadas a diversos proyectos, eventos y actividades de la oficina y el material de oficina del día a día. También pueden ser útiles para guardar los enseres personales. Esto resulta ideal para tener orden dentro de los espacios de trabajo. Pero sin dejar de tener al alcance esos documentos tan necesarios para la oportuna toma de decisiones.

Los archivadores pequeños nos permiten aprovechar mejor el espacio

Los archivadores de oficina, por su tamaño compacto y su versatilidad son la opción perfecta para distribuir y aprovechar el espacio de trabajo. Por ejemplo, en una oficina compartida por tres colaboradores, se puede colocar bajo el escritorio de cada uno un archivador pequeño para su material. Aprovechan el espacio bajo las mesas y en los rincones donde no podríamos usarlo. Por eso son una gran aportación a cualquier puesto de trabajo.

Pueden ser compartidos y también móviles

Por otro lado, aunque a lo largo del tiempo exista un nivel medio o alto de rotación de personal, los archivadores pequeños permanecerán. Porque podrán resultar útiles para todos aquellos colaboradores que se conviertan en sus usuarios durante su vida útil. Además se pueden mover con la facilidad ya que disponen de ruedas. Esto los hace muy prácticos en puestos rotativos o dinámicos.

En empresas donde no se asigna un puesto fijo al personal, cada uno tiene su archivador. De esta forma al llegar recoge su archivador y se instala en la mesa que esté disponible. De esta forma aprovechamos mejor el espacio y todo el mundo tiene siempre a mano su material y documentación.

Configuraciones diferentes

En los archivadores pequeños podemos encontrar distintos tipos de configuraciones que se adapten a nuestras necesidades. Los hay de tres cajones y los de cajón y archivo. Así como con distintas alturas y anchuras según el espacio disponible. Los archivadores pequeños para oficina también pueden contar con varillas interiores para colocar carpetas colgantes en uno de sus compartimientos. Regularmente en el más grande de estos.

Seguridad de los archivadores pequeños

Muchos archivadores pequeños cuentan con un sistema de bloqueo que puede darse a través de una llave con cerradura o un sistema de introducción de códigos. De esta forma solo tendremos nosotros acceso a nuestra documentación y material. O quién nosotros deseemos. Esto nos da seguridad para guardar documentación confidencial y que no queremos que sea pública.

Otras opciones de archivadores pequeños

Asimismo, algunos modelos presentan recubrimientos de resistencia al polvo para mantener su acabado a pesar del paso del tiempo. En ocasiones también cuentan con una superficie adaptada para su uso como butaca, gracias a un elegante y vistoso tapizado; o bien, como mesa auxiliar que se pueda colocar discretamente bajo el escritorio.
Por otro lado, otros modelos pueden incorporarse como soporte para la mesa de trabajo. De esta manera su composición es resistente al peso del material interior. Así como al peso de la mesa y los materiales que se posen sobre ella. Y también les permite tener una mayor altura, lo que nos aporta mayor espacio de almacenamiento.

Cómo hemos visto, los archivadores pequeños para oficina nos ofrecen una solución muy práctica al problema del almacenamiento. Además con opciones y configuraciones que se adaptan a todos los puestos. Por ello, será bastante sencillo encontrar entre todos los modelos del mercado uno que se adapte sin inconvenientes a tus expectativas y a las condiciones de tus oficinas. Y tú, ¿tienes archivadores pequeños en tu oficina?