Arquitectura y diseño

Colores para pintar oficinas pequeñas

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¿Quieres sacar el máximo partido a tu oficina? ¿Te sientes agobiado en el espacio de trabajo? ¿Se te caen las paredes encima? ¿Sientes que trabajas en un lugar demasiado reducido? A continuación te presento los mejores colores para pintar oficinas pequeñas modernas.

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Consejos para pintar despachos y oficinas pequeños

Pintar una oficina pequeña no tiene porque ser un problema si seguimos una serie de consejos prácticos. Uno de los aspectos más importantes a la hora de sacar el máximo provecho a los espacios pequeños es elegir los colores adecuados para pintar las paredes y techos.

El color para una oficina tiene un efecto muy positivo en nuestro ánimo pero además puede ayudar a crear efectos ópticos que hagan que un espacio parezca más amplio y luminoso. El objetivo en general es aportar luz a ese espacio. Esto es mucho más sencillo si la estancia que tenemos que decorar dispone de mucha luz natural pero si no la tiene, no desesperes y sigue los siguientes trucos para pintar oficinas pequeñas.

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Pintar tu oficina pequeña con olores claros

En primer lugar, elegiremos tonos claros que creen un efecto de amplitud y confort. Estos colores reflejan la luz haciendo que los ambientes se perciban como más espaciosos. Dentro de los tonos claros podemos elegir el blanco y toda su gama de matices. A primera vista el blanco se nos puede hacer un color aburrido pero en realidad tiene muchos tonos distintos.

La mejor manera de sacarle el máximo partido es usando estos tonos blancos para combinarlos con otros colores. Una muy buena idea es combinar el blanco con toques de color en la decoración como por ejemplo dando una nota de alegría escogiendo una silla u otro elemento pequeño de un color alegre. Otro color muy adecuado para pintar oficinas pequeñas es el azul fresco.

Pintar en colores cálidos la oficina crea efectos de cercanía por lo que no nos interesan, mientras que los tonos fríos por el contrario aparentan estar más lejos haciendo que los espacios se vean mucho más anchos y amplios. De esta manera los muros parece que se separen y las estancias crecen. Finalmente tenemos los colores neutros como el beis, gris o marrón que ayudan a que la vista no se detenga en ningún elemento creando mucha armonía. Por lo demás es importante que no haya ningún tipo de papel pintado ya que los patrones en general hacen que el espacio sea percibido como más lleno y reducido.

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Da continuidad cromática a tu despacho

La continuidad cromática es una opción muy importante ya que permite crear espacios armónicos. En general elegiremos el mismo color para paredes y techo, aunque algo más claro en el techo, creando una continuidad en el color que recoja la luz. Si eliminamos los cuadros y mantenemos el orden conseguiremos potenciar mucho más este efecto. Si además elegimos cortinas y pintamos las ventanas del mismo color haremos que el techo parezca mucho más alto.

Lo que proponemos es justamente no hacer lo que se ve en la siguiente imagen. El primer error es haber elegido muebles oscuros que absorben la luz en lugar de rebotarla. De esta manera la estancia se ve todavía mucho más pequeña y agobiante. ¿Verdad que no apetece nada trabajar en este espacio?

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Otro error es haber pintado de negro la pared. Se trata del peor color que se podría haber elegido. Es el color más oscuro que existe y apaga las estancias. No es que se trate de un color prohibido pero desde luego que es una mala elección si hablamos de espacios pequeños. Además al estar al lado de paredes tan blancas se rompe con la continuidad y la armonía del espacio.

Techos mucho más claros

Sin importar el color que se elija, lo ideal para agrandar el espacio es pintar el techo de tu oficina más claro que las paredes. Una de las mejores opciones para pintar el techo es el blanco ya que hace que las paredes se vean más altas y crea la ilusión de que el techo está mucho más arriba.

Excepciones a todo lo anterior

En este apartado vamos a dar una serie de ideas que contradicen lo que hemos expuesto hasta ahora que es básicamente que para pintar oficinas pequeñas hay que

-Elegir colores claros; a ser posible tonos blancos o fríos

-Pintar todas las paredes del mismo color para generar continuidad cromática

-Pintar los techos de colores más claros que las paredes

Para crear un efecto de profundidad se puede pintar la pared opuesta a la entrada un par de tonos más oscura. De esta manera parecerá que las paredes se separan y hay más espacio. Este efecto se verá mucho más potenciado si en esa pared hay una ventana.

Existe la creencia de que los estampados crean una ilusión óptica que hace que el espacio sea percibido como más lleno y agobiante. Esto es así en general pero hay excepciones, como por ejemplo las rayas que ayudan a aumentar la percepción del espacio. Si pintamos rayas anchas de color generaremos un efecto de mayor profundidad mientras que con rayas estrechas parecerá que la estancia tiene más altura. Otro truco muy curioso es pintar las paredes haciendo un degradado. De esta manera se genera un efecto óptico que hace que percibamos la estancia mucho más amplia.

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Habíamos dicho que los techos deben pintarse de colores más claros que las paredes pero hay una excepción y es cuando se trata de una habitación pequeña de techo muy alto. En este caso existe la posibilidad de pintar el techo de un color oscuro para crear un efecto de refugio acogedor. De esta manera armonizamos el tamaño pequeño de la estancia.

¿Os animáis a sacar el máximo provecho a vuestras oficinas pequeñas dándoles un toque de color?

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